Lector, que te aventuras por estas páginas,
es improbable que compartas, entiendas o comulgues con mi visión de las cosas. No busco convencerte de nada.
Bref, no tengo más propósito para escribir estas líneas que el deseo y el placer de hacerlo...
Los culpables:
Una vida de películaMi madre la reina
martes, 30 de julio de 2013
Cuadro surrealista
Es acabar jugando al chinchón con cinco ex-alumnos y alumnas míos a las 8 y media de la tarde en el chalet de enfrente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario